Excursión a Shangai Disney Resort

Shangai Disney Resort iba a ser la última etapa del ultimo día de este viaje a través de China por libre. Según iba avanzado el viaje iba viendo como eran los propios turistas chinos, la clase de turista que son lo que les gustan las turistadas, desde las fotos con traje regional, selfies con posturitas que forman un corazón con los brazos, gatos que mueven la pata,… así que cada vez iba teniendo más claro que no podía irme de Shangai sin hacer alguna yo mismo. La mejor opción que encontré, la más divertida, fue ir a pasar mi último día en Shangai a Shanghai Disney Resort. Mi primer parque Disney.

Para aprovechar bien el día, lo mejor es estar en la puerta del recinto en cuanto abren, 8AM, ya que después las colas son interminables. La forma más cómoda y barata de llegar allí es en metro combinando, en mi caso, las líneas 2, 16 y 15 el recorrido es largo un poco más de una hora entre trayectos y trasbordos así que hoy toca madrugar para ver a Mickey y a Donald. Estamos a finales de Octubre y todos los carteles de Shanghai Disney Resort que llevo viendo estos días por todas las estaciones de metro están relacionadas con Halloween, Donald vampiro, calabazas con forma de la cada de Mickey,… sabrán estos chinos de que va este rollo? También hay muchas referencias a los vengadores, parece que Holliwood intenta entrar en este mercado a base de talonario. En la estación de la plaza de People’s square había un martillo gigante de Thor de 3 metros de alto que dominaba el centro de la estación.

A las 8 de la mañana como un reloj llegábamos a la última estación de la línea que es la de Shanghai Disney Resort, antes de salir hacia el recinto me aseguré de comprar el billete de vuelta para que no me pasara lo mismo que el día anterior en la excursión de Sozhou. Para cuando llegué a la cola, aún no había abierto el recinto, ya había un montonazo de gente, tanta que la cola se salía de el espacio de vallas en zigzag. Al poco empezó a moverse y como un caracol llegamos al primer control. La entrada sin problema, estás en la zona «pública» del parque, en la primera casa venden las entradas por 370RMB de lunes a viernes, bastante más caras si se va en fin de semana. Con el ticket en la mano sigues adelante y vuelves a hacer cola en lo que es realmente la puerta de entrada del parque.

Seguro que para todos los que hayan estado antes en un parque Disney nada es novedoso, pero en mi caso que era mi primera vez, qué divertido era todo. Todo el parque estaba tematizado para Halloween, todas las farolas con calabazas, todas las estatuas vampirizadas, hasta la plaza central con una super calabaza por no hablar de las actuaciones y bailes. El parque es muy nuevo, fue construido en 2016 y eso se nota, atracciones nuevas con temáticas recientes, buenos servicios de hostelería, taquillas por todas partes para poder dejar las cosas,…

La entrada de Shanghai Disney Resort corresponde al pueblo de Mickey tiendas de recuerdos y cafeterías que da paso a los jardines de la imaginación, las tazas de Winnie de Pooh, los selfis con Pluto y resto de personajes Disney. Empecé el recorrido hacia la derecha para poder acabar al anochecer en Tomorrowland que es uno de los platos fuertes del parque. La primera parada fue en la isla de la aventura que tiene un par de atracciones interesantes.

Roaring Rapids: la típica atracción de agua con asientos para 6 sobre un gran flotador. No había demasiada gente así que la cola fue rápida. Había vendedores de txubaskeros que hacían el agosto con todos los chinitos miedosos, muchos de ellos los regalaban al salir y los que estaban a punto de entrar se ponían los dos. Hacía calor así que pasé de cocerme bajo el plástico. Me tocó montarme con un grupo de 5 chicas chinas jovencitas que no paraban de reírse en cada curva o en cada rápido donde el agua entraba y te empapaba la ropa. Un buen comienzo de día.
Camp Discovery: En el mismo espacio con la enorme montaña de fondo este campamento multi-aventura es sencillo pero divertido. Tras calzarte el arnés este se sujeta a una especie de gancho que discurre por unas raíles que dirigen tu camino mientras avanzas arrastrándolo y evitan que te puedas caer en algún punto del recorrido. Es muy sencillo pero consigue el efecto deseado, diversión.

Al salir, está el escenario donde se hace el espectáculo de Tarzán, miré las horas y planifique la visita para volver más tarde a la hora exacta de la apertura porque tenía muchas ganas de verlo. Sin que se ofenda nadie es una especie de circo del sol, con acróbatas trapecistas y malabares que se termina haciendo demasiado corto, podría haber estado allí media horita mas. Además, después de haber visto a Jack Sparrow hablando en chino, ver a Tarzán dando brincos con un montón de platos girando sobre unos palitos no se hace tan raro jajajaja

Junto a Tarzán, está el espacio de la Cueva del Tesoro uno de los que más me gustaron ya que soy muy fan de piratas del caribe y aquí todo huele a botella de ron. Todo este espacio está super bien adaptado, se hace muy raro la mezcla de ver los nombres de los restaurantes en español para ambientar y que luego los piratas hablen chino, pero esta es también la gracia de venir por aquí. La visita al barco es muy rápida pero te me te en el juego, la representación de teatro sin saber chino no aporta mucho porque queda un poco raro aunque para captar el argumento principal no haga falta entender ni una sola palabra.

Sin duda lo mejor es la atracción de Piratas del caribe, es simplemente brutal, como diría Alan x el mundo «esto está padrísimo». La ambientación es perfecta, las galerías de la cantina donde se hace la cola para entrar te sumergen en el caribe y por mucho tiempo de cola que tengas no te aburrirás. Tuve suerte de ir sólo y poder aprovechar para meterme en una esquinita de la primera fila de la barca. No hay palabras para describir lo fantástica que es esta atracción, al final del post incluiré un par de vídeos de Alan x el mundo que son insuperables y no te puedes perder si tienes dudas sobre si merece la pena o no venir a a este parque a pasar el día.

Tras la emoción de las aventuras con Jack Sparrow y el Holandés errante, de atravesar el fondo del mar y estar a punto de morir bajo los cañones de la perla negra, me metí en la cantina a calmar mi hambre. La comida estaba rica pero lo mejor era el patio de la cantina. Un patio interior con pórticos y ventanas estilo caribeño situado al borde del río por donde finaliza el recorrido de la atracción de los piratas y con un cielo estrellado por miles de minibombillas que te hacen sentir que estás en otro sitio y e otro momento. No se como serán el resto de restaurantes del parque pero este no tiene desperdicio.

En Fantasy land es muy divertido el tren de los siete enanitos que a pesar de no ser una montaña rusa, sí que va rapidíto y tiene alguna curva fuerte al salir de la mina. El vuelo de Peter Pan es un pase en un barco volador que cuelga del techo y da sensación de flotar por la casa de Wendy, un buen sitio para tomarse un respiro rodeado de magia. Desede ahí, se puede atravesar el espejo y pasear por los jardines de Alicia en el país de las maravillas quedan acceso al castillo Disney y conocer a sus princesas. Yo evité el castillo y esperé un poco a que empezase el espectáculo de baile, luz y color. Lo tienen bien montado aunque para mi resultó un poco monótono.

Visitado a mis amigos los vengadores en Shangahai Disney Resort

La guinda del pastes el Tomorrowland donde puedes encontrar la montaña rusa de Tron, y como en la película te montas en una moto que te hace volar, giros y vueltas recorriendo los circuitos de una placa base, mucha adrenalina, como para volverse a montar. Para mí, Tron junto con Piratas del caribe son lo mejor del parque. Merece la pena esperar para ir a Tomorroland porque cuando de noche, con las luces encendidas es mil veces mejor que de día.

Creo que me monté en todo lo que uno se puede montar que no sean las tazas de Winnie de Pooh, una maravilla de experiencia, si te gustan los parques de atraiciones no te lo pierdas porque merece la pena pasar por aquí si consigues dedicarle un día. Ya reventado me volví a Shangai a despedirme por última vez de su skyline y preparar la maleta para finalizar este viaje por libre recorriendo China.